En la misión de Witcher 3, "Ashen Marriage", Geralt ayuda a Triss Merigold y su prometido, Castello, en sus preparativos para una rápida boda en Novigrado. Sus tareas van desde el exterminio de monstruos en los canales de la ciudad hasta conseguir bebidas para la celebración y seleccionar un regalo de bodas para Triss. El significado del regalo impacta la respuesta de Triss, con una rosa de recuerdo (un guiño a The Witcher 2) que provoca una fuerte reacción emocional.
Sin embargo, surgen complicaciones imprevistas cuando Dijkstra revela la conexión de Castello con los cazadores de brujas. Esta revelación revela un elemento coercitivo en las acciones de Castello: está siendo chantajeado para ocultar a su hija ilegítima de un matrimonio anterior.
Geralt se enfrenta a la elección de revelar esta verdad a Triss, ya sea en privado o con Castello presente. Independientemente de su enfoque, la boda inevitablemente se cancela. La reacción de Triss varía según las circunstancias, desde la decepción hasta la gratitud por la honestidad de Castello, pero finalmente concluye que su prisa por casarse fue desacertada.
Este desarrollo de la trama presenta una oportunidad perdida. Una exploración más exhaustiva de esta historia podría haber enriquecido la relación entre Geralt y Triss, al mismo tiempo que habría proporcionado un desarrollo más sustancial de los personajes secundarios.