Valve ha refutado los recientes informes que afirmaban que su plataforma Steam experimentó una violación de datos "importante", afirmando rotundamente que "NO hubo ninguna violación" de los sistemas de Steam.
Aunque surgieron preocupaciones por las afirmaciones de que se expusieron 89 millones de registros de usuarios, la investigación de Steam descubrió que solo se filtraron mensajes de texto obsoletos que contenían códigos de verificación con límite de tiempo; ninguno de los cuales contenía información personal.
En un comunicado oficial en Steam, Valve aclaró: "Nuestro análisis de los datos filtrados confirma que solo incluían códigos de verificación por SMS caducados y los números de teléfono asociados. Es importante destacar que estos datos no vinculaban los números de teléfono con cuentas de Steam, contraseñas, datos de pago o cualquier información privada del usuario."
La compañía tranquilizó aún más a los usuarios: "Estos códigos antiguos no representan ningún riesgo de seguridad, ya que caducan en 15 minutos. Además, cualquier cambio de cuenta a través de SMS activa notificaciones por correo electrónico y en la Aplicación Móvil Segura para su verificación."
Valve aprovechó la oportunidad para reforzar las medidas de seguridad, recomendando a todos los usuarios que activen Steam Mobile Authenticator para la autenticación de dos factores, calificándola como "la salvaguardia más efectiva para las notificaciones de seguridad de la cuenta."
Con las crecientes amenazas cibernéticas y la enorme base de usuarios de Steam, que supera los 89 millones de cuentas, las preocupaciones iniciales eran comprensibles. La industria de los videojuegos ha enfrentado graves violaciones antes, más notablemente la interrupción del servicio de PlayStation Network en 2011 que duró un mes, comprometiendo 77 millones de cuentas.
Los datos corporativos también siguen siendo vulnerables. En octubre de 2023, Game Freak, desarrollador de Pokémon, sufrió filtraciones que expusieron registros de empleados y hojas de ruta de desarrollo. A principios de ese año, Sony confirmó violaciones que afectaron a 7.000 empleados actuales y anteriores, mientras que en diciembre se filtraron archivos de Marvel's Spider-Man de Insomniac Games en un ataque de alto perfil.